Qué orgullo ser cacereño

Mirad lo que habéis hecho cacereños de todo tiempo, la que habéis liado y en lo qué os habéis convertido. Quién os iba a decir hace unos años que ibais a llegar a esto. Mirad el vídeo que os ofrecemos a continuación y sentiros muy muy orgullosos de ser cacereños. El audiovidual presenta esa ciudad que se ha forjado a base de esfuerzos y de amor, una ciudad que alcanza su culmen estos días, que se mezcla entre sus imágenes y nuestras calles, entre lo divino y lo humano, entre el sentimiento y la devoción. Esa ciudad que vive y muere en nueve días, que se viste esta noche de festejo para vivirse siempre. Aunque llueva, truene o haga sol, mañana Cáceres estará preparada, impaciente por ver el rostro de un Nazareno, la mirada de una Esperanza, el desconsuelo de una lágrima y la profundidad de una victoria recriada y conformada sobre la fe de miles y miles de cacereños que, por más de seis siglos, la siguen engalanando con sus trajes, vistiendo estos días el interior de sus casas de los colores de sus hermandades en forma de túnicas colgadas de una puertas.

Qué orgullo ser cacereño, qué bonito es vivir la fe en esta ciudad, porque sus calles respiran incienso, los vientos suenan a horquillas sobre el suelo y sus esquinas, esconden melodías de corneta y de tambor mientras que sus torres, se inclinan siempre hacia sus sagrados titulares.

Llévame ante tí, tierra mía. Vuelve a abrazarme como lo hicistes aquel día y acurrucame en tu regazo, que yo te querré y te amaré por siempre pues más que tú, nadie lo merece.

TuSemanaSanta

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