Historia de la Cofradía de las Batallas

La Cofradía de las Batallas se constituye el 24 de octubre de 1951, pero sus Reglamentos no fueron aprobados por el Sr. Obispo de la Diócesis hasta el 16 de diciembre de 1952. Se denomina por entonces Cofradía del Stmo. Cristo de las Batallas.

La imagen que procesionaba era la del Santísimo Cristo de las Batallas. El autor de la imagen es el artista D. Antonio Arenas Martínez, natural de la provincia de Ciudad Real y asentando en Ávila. Al mismo tiempo eran adquiridas quince túnicas por un importe de 1.500 ptas. cada una, usándolas los primeros miembros de esta cofradía.

La imagen de Cáceres fue realizada en el año 1953, es fiel copia de la que existe en Ávila y que llevaban los Reyes Católicos en sus campañas. Se trata de un Cristo Nazareno, arrodillado en su primera caída.

Era aquella una época en la que aparecían en muchas localidades, cofradías penitenciales en estrecha colaboración con la autoridad castrense, existiendo advocaciones de Cristo de las Batallas en Avila, Salamanca, Burgos, Plasencia, León y Cáceres entre otros lugares de España. En muy pocas ocasiones se trata de crucificados, la mayoría de las veces son Cristos con la cruz a cuestas. Suelen ser imágenes de procedencia histórica y por consiguiente de gran antigüedad.

Aquí en Cáceres, la cofradía es fundada por Caballeros Mutilados y excombatientes de la Guerra Civil, participando también en la procesión personal activo y de guarnición en la propia ciudad, lo que contribuía a dar a la procesión un aire solemne y serio, difícilmente olvidable para cuantos la veían pasar.

El primer año, la Semana Santa de 1953, la Cofradía procesionó con grandes cruces y un Crucificado que en la actualidad no se utiliza. En la Semana Santa del año 1954, el Cristo de las Batallas, salió en una especie de carroza por carecer de andas apropiadas para ello. Era frecuente ver en la procesión de esta Cofradía, que era el Lunes Santo, con salida de la S.I. Concatedral de Santa María La Mayor de esta ciudad, a numerosos mutilados, personal en activo y la escuadra de gastadores del CIR, que iban dando escolta a la imagen, además de varias compañías de soldados y la banda de música del acuartelamiento. A lo que había que sumar la veintena de cofrades vestidos con la túnica negra y la cruz de Santiago, como distintivo (en rojo), en el pecho, con corona de espina de color blanco en el centro, portando media docena de ellos una cruz de madera a los hombros. Solemnidad que hacía que prácticamente todos los cacereños se echasen a la calle para ver tan espectacular y solemne procesión.

La Cofradía fue a más y su Junta de Gobierno inmediatamente pensó en sacar alguna imagen de Virgen que fuese acompañando a la del Nazareno y así en el año 1957 se estudia la posibilidad de procesionar a la Virgen del Carmen, que por aquel entonces se encontraba expuesta al culto en la Ermita de la Paz, algo que desgraciadamente no llegó a ser realidad.

Así de esta manera fueron transcurriendo los años cincuenta, sesenta y setenta, pero al establecersen un país aconfesional, dado que no se podía obligar a los soldados que estaban realizando su servicio militar a cargar en sus hombros con una imagen religiosa, la Cofradía deja de procesionar en la Semana Santa del año 1977

Su Junta de Gobierno continúa reuniéndose, dando cuentas tanto al Sr. Obispo como al Gobernador Militar, al mismo tiempo que buscan soluciones para la continuidad de la procesión del Stmo. Cristo de las Batallas, adaptándose a los nuevos tiempos. Pero infinidad de motivos impiden que esto se lleve a feliz término, además de la avanzada edad de la mayoría de los miembros que forman la Junta de Gobierno y la poca colaboración que encuentran en el resto de las cofradías de la ciudad, son malos tiempos para estas asociaciones.

Es la primavera del año 1984 cuando un reducido grupo de jóvenes y entusiastas cofrades contactamos con aquellos directivos y les proponemos la posibilidad de hacernos cargo de la Cofradía y volver a procesionar por nuestras calles y plazas. Se mantienen reuniones con el Gobernador Militar y con el Sr. Obispo, y todas las partes están de acuerdo en dicho cambio. Se hacen las correspondientes puntualizaciones, firmas de distintos documentos y compromisos por las partes implicadas. En aquel momento formamos la Cofradía poco más de un centenar de cacereños de ambos sexos y de todas las edades, sumándosenos los cofrades militares y civiles de la anterior etapa, así como sus familiares o amigos. Tenemos poco dinero pero nos sobra ilusión. En la Semana Santa Cacereña de 1985 despues de llevar nueve años sin hacerlo, procesiona de nuevo la Cofradía del Stmo. Cristo de las Batallas por nuestra ciudad.

Hay muchos cambios, la túnica es ahora de color rojo, llevando los hermanos de carga el rostro cubierto por un verduguillo de color negro, y los hermanos de escolta o de luz llevan capa y capuchón negros, el cíngulo que llevamos a la cintura es amarillo y los guantes de color negro.

Pero teníamos las ideas tan claras para los próximos años, que comenzamos a hacer los primeros planes para sacar en procesión la imagen de una Virgen acompañando a la del Cristo. Nos agrada especialmente la existente en la propia Iglesia de Santa María y que tiene la advocación de Virgen de los Dolores, propiedad de una asociación de señoras, que constituida en el siglo XIX daban culto a la imagen y en alguna ocasión dejaron a la Stma. Virgen que saliera con otras cofradías.

Se trata de una imagen, de vestir de tamaño natural y realizada en Madrid en el siglo XVIII, tiene un amplio y antiguo vestuario formado por varios mantos, y ropa muy variada donada por la nobleza de la ciudad. Tambien posee otro rostro, de la misma antigüedad que el que tiene puesto y que se le quitó por sufrir un lamentable accidente. Realizadas las oportunas reuniones con sus propietarias, se firman los correspondientes documentos y tanto la imagen como sus pertenencias y enseres se incorporan a la Cofradía de las Batallas, titulándose desde entonces: "Cofradía del Stmo. Cristo de las Batallas y María Stma. de los Dolores".

La Virgen es restaurada en Sevilla, por el imaginero hispalense D. Francisco Berlanga de Avila, se le actualiza el vestuario, sobre todo en lo concerniente a la ropa de procesión. Hay que tener en cuenta que la Virgen no procesionaba en la calle desde los años cincuenta.

En la Semana Santa de 1987 iniciamos una nueva procesión. Se trata del Sábado Santo, con salida de la Ermita de las Candelas (XIV), llevando la imagen de Ntra.Sra. del Buen Fín (XVII), propiedad de la Cof. de la Vera Cruz y que desde hace siglos se guarda y venera en el Convento de clausura de las Clarisas. Se trata la imagen de las denominadas de altar, es decir de tamaño más reducido que el natural, la procesionamos en las antiguas andas del Cristo de las Batallas, portada por 18 cofrades, y nosotros llevamos la misma túnica de color rojo pero con el verduguillo, capuchón, capa y guantes de color blanco. De esta manera queda toda la Semana Santa completa de procesiones, de las que nosotros realizamos dos, lo que agrada a nuestros cofrades y para Cáceres significa algo novedoso a la vez que atractivo.

El 19 de agosto, la familia Mayoralgo nos cede el uso de los títulos de Excma. e Ilustre, quedando desde ese preciso momento la Cofradía con el nombre que hasta hoy viene utilizando.

Es a partir del año 1989 cuando comienzan a realizarse una serie de actos a lo largo de todo el año que sirven para dar aún mas vida a nuestra cofradía y participación a sus miembros, tales son: Mesa de Ofrendas, antes de Semana Santa, así como el Tríduo al Stmo. Cristo de las Batallas, operación "Kilo" en Navidades y la Lotería de Navidad.

Con la llegada de la década de los años noventa toda una serie de acontecimientos se suceden en este colectivo que está ya compuesto por mas de quinientos cofrades de ambos sexos. Llevamos la mascarilla antigua de la Virgen de los Dolores a Sevilla y a partir de ella el imaginero y amigo Francisco Berlanga de Avila hace una nueva imagen de Virgen bajo la advocación de Ntra. Sra. del Buen Fín y Nazaret, que en 1990 sacamos en procesión el Sábado Santo pero ya sería desde la Concatedral de Santa María, como el Lunes. Va la Virgen vestida de hebrea, sobre el Monte Calvario con el sudario pendiendo de la cruz.

Pero no sería esta la única novedad de este año 1990, pues despues de haber solicitado varias veces por escrito a la Excma. Diputación Provincial la cesión de un Cristo Crucificado que en el año 1985 el investigador local y Mayordomo de esta Cofradía, D. Alonso J. Corrales Gaitán, encontró en el Convento de S.Francisco, el Ilmo. Sr. Presidente de dicha institución decide entregar dicha imagen, poco antes de la Semana Santa, a la cofradía por un periodo de cien años, haciéndose cargo del importe de la necesaria restauración. El mencionado Crucificado, es conocido como Cristo del Refugio, talla del siglo XVIII, de autor desconocido y desde siglos permaneció en lo alto del retablo que existió en el Convento de San Francisco el Real, hoy Institución Cultural "El Brocense", dependiente de la Diputación Provincial.

Después de ser rápidamente restaurada en Coria, en la escuela taller del Obispado, por la Licenciada en Bellas Artes, Doña Mª Antonia González Luceño, se le hacen unas andas metálicas, pues el Crucificado pesa mas de trescientos kilos, y se incorpora a la procesión del Lunes Santo, quedando de esta manera tres imágenes para ese día y la cuarta para el Sábado.

Una nueva actividad se suma a las anteriormente mencionadas, que realiza nuestra Cofradía, la venta de cruces de pan con anís, que en cantidad de varios cientos son donadas por el cofrade y amigo D. Angel Campos Jara, para tal fin.

Después de llevar algún tiempo realizando distintos contactos, en el año 1992 es una realidad el tener una banda de cornetas y tambores de nuestra propiedad, formada por un total de 35 miembros, todos mayores de edad. Para lo cual se ha realizado un desembolso inicial de 350.000 pta. que está previsto amortizar en los tres primeros años.

El 13 de abril de este mismo año, Lunes Santo, delante del Cristo de las Batallas firmamos el documento de Hermanamiento con el Presidente de la "Cofradía del Stmo. Cristo de las Batallas" de Avila, ya que se han desplazado siete de sus miembros para acompañarnos en nuestra procesión.

En los años siguientes la Cofradía continua creciendo en lo interno y en lo externo, se suceden infinidad de actos, colaboraciones, ayudas a los necesitados de la ciudad, se inicia la actividad de hacer excursiones a distintas ciudades y contactos con otras muchas cofradías, restauramos nuestras imágenes, hacemos nuevas andas para las mismas, adquirimos distintos objetos, estrechamos aún mas nuestros contactos con las distintas instituciones religiosas, civiles y militares de la ciudad, alcanzando así una inmejorable reputación en todos los ámbitos.

El 7 de junio del año 1997, firmamos un Acta de Hermanamiento con la "Pontificia y Real Cofradía de Ntro. Padre Jesús Nazareno y Ntra. Sra. de la Misericordia" de esta ciudad, ello como consecuencia de la gran cantidad de circunstancias que nos son comunes a los dos colectivos. Y así de esta manera hacemos un frente común para cualquier colaboración dentro o fuera de nuestras propias procesiones penitenciales, teniendo en cuenta que entre ambas formamos un colectivo de mas de cuatro mil cofrades. Los resultados no se han hecho esperar, la aparición de un Boletín conjunto, titulado "Cruz de Santiago".

El 20 de marzo de 1999, por iniciativa de la "Hermandad del Stmo. Crucifijo de Santa María (Cristo Negro)", con sede canónica en la S.I. Concatedral de Santa María de esta ciudad, se realiza un entrañable y emotivo acto de Hermanamiento con la nuestra del Cristo de las Batallas, así de esta manera las dos cofradías de este templo, que reaparecieron gracias a la labor de prácticamente las mismas personas y con un elevado grupo de sus miembros que son de ambos colectivos, quedan unidas para el futuro. Compartiendo todo aquello que desde el año 1986 les vincula y que ojalá se vea incrementado en los próximos años.

Fue en este 1999 cuando se cerró la primera de las etapas de nuestra cofradía, encabezada durante quince años como mayordomo por Alonso Corrales Gaitán, el cual dejaba un patrimonio histórico-artístico de sobrada categoría para las generaciones venideras.

En el mes de junio de 1999 se celebraron las elecciones en la Hermandad, y a ellas concurrieron como candidatos Antonio Jiménez Grajera y Jesús Espinosa Álvarez. De este procedimiento electoral salió victorioso, Jesús Espinosa Álvarez, con lo que una nueva andadura se abriría en la historia de la Cofradía, incorporando por primera vez a una mujer a la Junta Directiva.

La primera de las actuaciones de Jesús fue recuperar la Festividad de los Dolores de María que en épocas pasadas se celebraba, y con ello rendir culto a la que es la cotitular de la Cofradía, la Virgen de los Dolores, quedando montado el Altar de Culto en honor de la Virgen en su Capilla en Santa María.

En el Lunes Santo del año 2000, se nombra a la Excelentísima Diputación Provincial HERMANA DE HONOR DE LA VIRGEN, haciéndose entrega del título a la Vicepresidenta delante del paso de la Virgen.

Pasada la Semana Santa de 2000, por un cúmulo de circunstancias, Jesús Espinosa presentó su dimisión. Con ello hubieron de ser convocadas elecciones a mayordomo de la Cofradía, elecciones a las que concurrió como único candidato Ángel Arjona Cabrerizo. Se celebraron en junio de 2000.

Para el año 2001, la Cofradía tendría previsto celebrar el 50º Aniversario de la Fundación de la cofradía, desarrollándose una gran cantidad de actos culturales para conmemorar tal evento. Entre los actos que se llevaron a cabo destacar una exposición de todos los enseres de la cofradía entre el 19 de Marzo y el 28 de Abril, el Hermanamiento con la "Real, Venerable e Ilustre Cofradía de Nuestra Señora de los Dolores y Santísimo Cristo de la Clemencia de Córdoba" delante del Excmo. y Reverendísimo Sr . Obispo de la Diócesis de Coria Cáceres, D. Ciriaco Benavente Mateos, así como la celebración de una Misa Solemne el 28 de Octubre en la S.I. Concatedral como clausura de los Actos con la presencia de las Cofradías e Instituciones Hermanas.

Además, como dato anecdótico, precisamente por el turno rotativo establecido en la Unión de Cofradías Penitenciales de Cáceres entre las cofradías para aparecer en el cartel de la Semana Santa, en el 2001, por casualidades de la vida, fue nuestra cofradía la que ilustró este cartel, con lo que supuso un motivo más de celebración en nuestra cofradía.

Del mismo modo, hay que destacar que en el año 2001, nuestra cofradía fue galardonada con el Premio "Muñidor", que anualmente entrega la Cofradía Hermana del Cristo Negro, con la que a la par compartimos página web. Ello supuso otro motivo más de celebración en el seno de la Hermandad.

En el año 2002, nuestra cofradía acometería la restauración de la imagen del Fervoroso Cristo del Refugio, restauración llevada a cabo por el imaginero sevillano Francisco Berlanga de Ávila. Tras la misma, la Venerada Imagen presentaría el maginifico estado que actualmente podemos apreciar, una talla que se nos presenta a la perfección.

Tras la misma, el 19 de marzo de dicho año, en el transcurso de la venta de cruces de pan, aprovechando que aquel año fue fiesta y coincidió con el Martes de Pasión, se celebró la ceremonia de bendición del Cristo en la Eucaristía de 13:00 de la Iglesia de Santa María. Dicha Eucaristía fue realizada en acción de gracias por la gran restauración realizada.

Tras estos hechos relatados, nos colocamos ya en el año 2003, a finales de este año: han transcurrido ya dos Semanas Santas (2002 y 2003); en este momento, en diciembre de este 2003 tras no vivir la cofradía uno de los mejores momentos, se celebran unas nuevas elecciones a mayordomo, como consecuencia de la dimisión de Ángel Arjona Cabrerizo. De esta elección salió elegido Juan Ignacio Blanco Palacios.

Con la llegada del nuevo mayordomo, se mantendrían en el 2004 las cosas tal cual estaban, recobrando en este año la confianza e ilusión de un más que notable número de hermanos.

En el año 2005, se acometería una necesaria restauración al Cristo de las Batallas, imagen titular de la Cofradía, luciendo para ese año en perfectas condiciones para la procesión del Lunes Santo y, este 2005 de manera extraordinaria, para la salida procesional del Viernes Santo con motivo del Santo Entierro Magno, organizado por la Unión de Cofradías Penitenciales.

Para dicha ocasión, lució nuestra Imagen Titular un original exorno floral basado en un manto de césped, salpicado con centros de flores silvestres, con lo que ofreció un aspecto diferente.

Llegado el año 2008, es cuando la Cofradía vive un nuevo período electoral con motivo del fin del mandato como Mayordomo de Juan Ignacio Palacios. Estas últimas elecciones despiertan un gran interés entre los hermanos ya que concurren a la convocatoria dos hermanos de la Cofradía (dato éste que no se producía desde el año 1999 cuando concurrieron dos hermanos, Antonio Mª Jiménez Grajera y Jesús Manuel Espinosa Álvares), Ángel Amado Sánchez e Inmaculada Hernández Paz. Tras realizarse el escrutinio electoral, sale victoriosa Inmaculada Hernández Paz, con una amplia diferencia sobre su oponente.

Estas elecciones suponen la incporporación, por vez primera en su historia, de una mujer al cargo de la mayordomía de la cofradía, dato muy importante en la sociedad en la que vivimos en la que la igualdad de derechos por razón de sexo está a la orden del día.

Con ello, se nos presenta ante los ojos una Hermandad perfectamente adaptada a los cacereños.

Fuente: Cofradía de las Batallas.


TuSemanaSanta

No hay comentarios: