Juan Narciso García Plata pronunció ayer el Pregón de la Semana Santa 2018. Quien fuera mayordomo de la Cofradía del Amparo, Presidente de la UCP, pero sobre todo cofrade cacereño, se acercó a esos sueños de niños hechos adultos convertidos en Cofradías, con el fin de expresar el sentir popular de los cristianos en la calle. Fue un pregón desde la óptica de un cofrade que aun habiendo pasado por numerosos cargos de responsabilidad en nuestra Semana Santa, sigue viéndola desde los mismos ojos de un hermano raso, que la ve acercarse con la ilusión y con el deseo de volver a vivir una Pasión diferente e inigualable. Fue también el pregón de los "nombres anónimos", pues se acordó de tantos y tantos cofrades cacereños pasados y presentes que trabajaron y trabajan calladamente por nuestra Semana Santa.

Todo ello acompañado por fotografías de JJ Castela y varios vídeos de TuSemanaSanta. Desde aquí le agradecemos a Juan que haya utilizado estos vídeos para ilustrar la Pasión que pregonó ayer. También participó en el pregón Antonio Luis Suárez Moreno, interpretando magistralmente las marchas Mi Amargura de Víctor Manuel Ferrer Castillo y La Madrugá de Abel Moreno. También sonaron de fondo varias marchas, entre ellas Al Santo Crucifijo de Santa María de Raúl Martín Cruzado cuando se dirigía Juan Narciso al Cristo Negro. Concluyó el pregón con la música de fondo de Sr. Gañán y su videoclip PASSYON.

La presentación del Pregonero corrió a cargo de David Remedios Solís y la del acto, de Ismael López, que como siempre hicieron una labor inmaculada para que el acto se desarrollara con total brillantez, ayudados siempre por el resto de miembros de la UCP que año a año van dándole al pregón todo el esplendor que se merece.

La presidencia del acto, como es habitual, correspondió a Monseñor Francisco Cerro, quien estuvo acompañado por la Alcaldesa de Cáceres.

Entre todos, supieron poner a Cáceres en suerte para la Semana Santa, encarando los cacereños la pasión tan amada por tantos y tantos cofrades cuyos corazones andan ya con la taquicardia de las horas previas al acontecimiento más importante del año.