Ayer finalizaron los cultos en honor a la Virgen del Dulce Nombre y Esperanza en El Barrio del Vivero. Tras el Triduo, en el día de ayer tuvo lugar la función principal y besamos.

Durante el transcurso de la Eucaristía, 22 nuevos Hermanos tomaron posesión de su medalla como miembros de la corporación del Vivero. Finalizada la misma, los fieles y Hermanos presentes, pasaron por delante de la imagen para besar sus manos.

Ahora esta Hermandad centra sus esfuerzos en los ensayos preparatorios, limpieza de enseres y montaje del paso para su estación penitencial el próximo Domingo de Ramos, con un nuevo reto y un nuevo recorrido, que a buen seguro gustará a los cacereños que tendrán toda una jornada de procesiones, de forma ininterrumpida, desde las 12:15 de la mañana hasta pasada la media noche.