Cientos de fieles que acompañaron durante el recorrido de la procesión, al ritmo de los cánticos celestiales interpretados por el Coro Parroquial, hacía una mañana distinta en la tranquilidad y el sosiego en los aledaños al Santuario de la Divina Misericordia.
Presidió el cortejo, el Vicario General de la Diócesis, D. Diego Zambrano, acompañado por los Reverendos D. Ramón Piñero y D. Juan Rodríguez Martín juntos con los seminaristas que perfumaron las calles con incienso al paso del Cuadro.
Ya dentro del Centro Pastoral se ofició la Eucaristía, terminando la jornada con un ágape y la tradicional mesa de ofrendas con platos típicos aportados por los fieles.
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