Cuando empezábamos a contar con una posibilidad muy alta de que se suspendieran las procesiones del Lunes y Martes Santo por la alta probabilidad de chubascos, a medida que se van aproximando los días elegidos para la gloria, vamos conociendo la progresión de esa borrasca que nos acompañará en la primera mitad de la Semana Santa. Se van disipando las posibilidades de que haya chubascos dispersos el Miércoles Santo, algo que apuntaban las previsiones ayer, cayendo a tan solo un 10% por lo que parecen prácticamente descartadas. Por su parte, el Lunes y Martes Santo se reduce la cantidad de lluvia que descargará en nuestra ciudad y caen las probabilidades de chubascos para la tarde y noche a un 70% y un 40% respectivamente, habiendo posibilidades de incluso de algunos claros. Aunque las predicciones seguirán variando y habrá que esperar hasta el último momento, se abre un hilo de esperanza para las Cofradías de Salud, Batallas, Ramos, Despojado (que recordemos que es su primera Estación de Penitencia) y Amparo. Confiemos en que se confirme esta mejoría y las lluvias, en caso de producirse caigan por la mañana y deje las tardes para la más dichosa de la primaveras.